Aprovechando el frío,
se nos ocurrió realizar una caminata por el sur, una
de las que no se pueden hacer un día de solajero. La ruta está en la página del
Ayto de Mogán, pero como desde aquí no se puede descargar, recurrimos como casi
siempre a global. http://www.globalsu.net/es/ruta_int.php?n=20.
El problema de la ruta es como llegar al
comienzo, en la Degollada de Tasarte. No pasan guaguas temprano que vayan desde
Mogán a la Aldea, y si se decide coger un taxi, tenéis que saber, que
en Mogán no hay taxis para 8 personas y que en el pueblo de Mogán solo hay
un Taxi, obligado a estar allí de guardia. Pues eso, que el
amable taxista dio un viaje con cuatro de nosotros y volvió a por los tres
que quedaron.
Todo esto lo explico, para que
si alguien piensa hacer la ruta, no crea que
llamando por la emisora a otro taxi, este vendrá desde la playa para llevarlos.
Bueno, lo mismo tenéis suerte, pero a nosotros nos dejo tirados.
El recorrido desde Tasarte a Veneguera no
es difícil, está señalizado con mojones, y se puede ver durante
el recorrido las huellas del Incendio del 2007, y como se ha recuperado
nuestra Palmera canaria, curioso ver los troncos
chamuscados por el incendio y sus frondosas hojas verdes.
Como la caminata la empezamos a las 10:30,
"por el taxista que nos dejo votados", (sabréis que con estás
palabras me la estoy jugando, pero los que se pueden sentir, no leen mucho el
blog), desechamos la opción de ir a ver el Flamboyán Gigante de Veneguera. Se
nos hacía tarde, y la comida es sagrada, además que estábamos viendo
la cuesta que nos iba a tocar subir para llegar a Mogán.
El último tramo, de Veneguera a Mogán
casco, no tiene perdida y si os veis apurados, seguir a cualquier guiri que
seguro que sabe llegar a Mogán. Esta parte del recorrido esta muy
transitada, sobre todo por guiris, de la de especie te dejo en vergüenza.
Esta especie de guiri es la que, seguramente están jubilados, llegan de
vacaciones a un lugar, se hacen con las rutas, cogen la guagua, se bajan en un
punto y se echan a caminar. Hasta aquí bien, pero que cuando terminen de subir
la cuesta lleguen con más aliento que nosotros, es lo de vergüenza. Menos mal
que iban delante de nosotros, que si no, nos adelantan. Creo que el secreto
está en los pedazos de gemelos que tenían, seguramente serían
implantados, pienso yo, porque aquellos gemelos no eran normales.
Una variación de esta ruta sería salir desde Mogán pasar por Veneguera llegar a la zona desde donde se ven los Azulejos y volver a Mogán por el mismo sitio, o al llegar a Veneguera, ir a ver El Flamboyán Gigante y volver también por el mismo sitio. Hacer las dos rutas y volver ya es para nota.
Besotes para los que no fueron, pero que van a seguir viniendo.
Señalización
Palmera canaria, recuperada del Incendio
Compañeras, asombradas con los Guiris